sábado, 13 de diciembre de 2008

El misil de Arie Haan

El que os mostramos hoy es uno de los mejores goles de la historia de los Mundiales. Fue en Argentina 78. Italia y Holanda empataban a un gol en una de las semifinales del campeonato después de que el holandés Willy Brandts convirtiera dos tantos, uno en su propia portería y, posteriormente, otro en la italiana.

Con el partido empatado, Arie Haan, soltó un tremendo disparo desde unos 40 metros que se alojó irremediablemente en la meta que defendía Dino Zoff. Precioso e importantísimo gol con el que "la naranja mecanica" se plantaba en su segunda final mundial consecutiva.

0 comentarios: